Luego del descanso y una fecha suspendida por lluvia que postergó el enfrentamiento contra Corsarios para el final del campeonato, llegamos a la semana 5. Tercer partido para Tiburones, esta vez contra un sorpresivamente debilitado conjunto de Jabalíes, que suman muchas bajas en lo que va de la competencia.
El juego comenzó sin renovaciones para el conjunto de Jabalíes, mientras que Tiburones avanzaba lenta y determinadamente por la vía terrestre. Juan Calvete y Augusto Bazán cruzaron la cancha y ya en la zona roja en dos oportunidades Kotliar buscó el touchdown por vía aérea, que no llegaría en el primer cuarto. El segundo cuarto tuvo más ímpetu para Jabalíes, que reorganizados se plantaron en la puerta de las 20 contrarias, encontrándose con una defensiva que le impidió convertir por medio de acarreo. Fue en un cuarto intento, un doble hut que dejó mal parada a la defensiva de Tiburones, la jugada siguió viva y la oportunidad de pase directo al endzone se convirtió en el 0-7 a favor de Jabalíes.
Desconcentrados, el juego siguió con mala suerte para Tiburones, que casi pierden posesión por un fumble en el kickoff return posterior a la anotación. Sucesivos acarreos se cancelaron con tackles en el backfield, obligando a entregar el balón tras un desesperado intento por aire. Jabalíes mató el reloj y el equipo de Tiburones se fue al entretiempo con muchas preguntas en la cabeza.
El segundo tiempo empezó con renovadas esperanzas, tras un gran fumble provocado por Iván Sayús en la recepción de kickoff y recuperado por Agustín Barraquero en su tan esperado regreso a la cancha. Asi, desde la yarda 10 el conjunto colorado embistió repetidamente la defensiva de Jabalíes para hacerse con el empate con un acarreo de Calvete. Jabalíes recuperó cancha sin convertir, y Tiburones hizo lo mismo, acercándose a la zona roja.
Ya en el último cuarto, infructuosos intentos aéreos llevaría a Allan Kotliar a repetir la estrategia terrestre, haciendo él mismo un bootleg, zambulléndose sobre el pylon derecho y logrando alcanzando la superioridad por primera vez en la jornada. Y luego de una entrega por punt, Tiburones volvería con una serie terrestre que llevaría a Calvete a las diagonales para el 21-7. A pesar de una seguidilla de malos snaps, Jabalíes se recuperó a 21-14 por la vía aérea, pero no le alcanzó para empatar el partido, que en toda la segunda mitad fue dominada por Tiburones en varios aspectos. Un kickoff corto frustrado por Joaquín Szyldergemajn dictó la sentencia para los Jabalíes, que no pudieron salvarse de una jornada de cacería terrestre.